KABAROVSK – KABAROVSK: 10 KMS.
(8 de agosto del 2010)
(8 de agosto del 2010)
Por la mañana asaltamos el buffet de desayuno del Hotel pues había que amortizar el precio de la habitación y recuperar así tres días de comer galletas y poco más. Una señora me miraba y pensaba: ¿cómo puede comer tanto este escuálido?
Con las motos nos dimos un rule turístico y buscamos en vano algo de información sobre el ferry de Vladivostok.
Obelisco soviético y Estatua a los Luchadores por la Patria.
La Iglesia Ortodoxa de Jram Uspenya Bozhey Materi.
Marchamos luego al hotel a hacer la colada que era muy necesaria y a repasar las motos y hacer el cambio de aceite en mí caso. Ya debería de ser el último hasta el final.
Por la tarde nos dimos una caminata muy agradable ya que todo el mundo estaba disfrutando del domingo.
Rusia es así, dos mega limusinas de lujo en un patio cochambroso.
Monumento a Yerofey Jávarov, un explorador ruso que da nombre a esta bella ciudad.
Plaza frente a la estación de tren desde donde multitud de hombres de negocios chinos van y vienen a la ciudad.
La estación.
¿Barcelona -Japón dices? ¡Que barbaridad!
Al hilo de esto es muy curioso que al empezar el viaje por Rusia, cuando estábamos en el Oeste al responder que íbamos a Japón la gente decía ¿”Iaponia”? (¿a Japón?) ¡Increíble!, en cambio cuando ya estábamos en esta parte Este de Rusia, cuando respondíamos que veníamos de España la gente decía ¿”Spania”? (¿de España?) ¡Increíble!. Ya veis que todo es relativo y depende de la parte del mundo que ves en tu mapa, jajaja.
Carles posando con China al fondo. De la rubia no digo nada.
El paseo marítimo de Kabarovsk.
La Iglesia Ortodoxa desde abajo.
Un toque yankee.
El abuso del vodka es demasiado habitual.
Fashion-sesión de fotos y bellezas rusas.
La escalinata hacia la parte alta y la Iglesia.
Si hay que subir... se sube y un estímulo agradable nunca viene mal. También
los ciclistas suben las cuestas a rueda, ¿no?
los ciclistas suben las cuestas a rueda, ¿no?
A ésta la prometieron una vuelta en descapotable de lujo...jajaja.
Cerca de la bonita y céntrica Plaza Lenin hay una hamburguesería que no está mal donde cenamos. Carles, no seas avaricioso que quien mucho abarca poco aprieta...
Tras un estupendo día de relax y los pies ya casi escocidos, volvimos al hotel donde las motos seguían en el patio interior. Estábamos a punto para mañana, objetivo Vladivostok ni más ni menos (!)
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